Centro de Interpretación del Paisaje (Pantano del Negratín, Granada)

Como Proyecto Fin de Carrera de Arquitectura escogí un tema para desarrollar que me permitió realizar una investigación exhaustiva sobre las formas de habitar el paisaje, su conocimiento a través del dibujo y la inspiración de un lugar con mucha historia.

El proyecto estaría ubicado en las inmediaciones del Pantano del Negratín, en la zona conocida como el Altiplano de Granada.

La ubicación en la que nos encontramos pertenece al municipio de Zújar, en las faldas del cerro del Jabalcón y prácticamente en la orilla del propio pantano.

Algo que caracteriza a este paisaje es la tipología de su suelo, conocido como ‘bad lands’, que genera formas muy reconocibles y escultóricas. En el siguiente dibujo intenté encontrar una forma de representar cómo ese suelo, definido a través de sus pendientes y de los caminos que el hombre ha ido creando con el paso del tiempo, iba a decidir en gran parte el diseño del edificio.

Era también una cuestión de vital importancia conocer los ciclos de ascenso y descenso del nivel de agua del embalse, y para ello se hicieron las siguientes planimetrías, que además señalaban las curvas de nivel a través de sus pendientes.

El siguiente paso fue analizar cómo había afectado el paso del ser humano por este paisaje. Se indagó en la historia de unos antiguos baños romanos y se analizó las arquitecturas olvidadas que aún hoy siguen estando presentes en el lugar, como son las cuevas oradas en el terreno y las construcciones sobrias y masivas de hormigón.

 

¿Hasta dónde había llegado el hombre con sus construcciones subterráneas? ¿Era posible aún hoy en día esta forma de habitar, que tantas veces encontramos en la naturaleza y que tan poco altera el paisaje? La respuesta era clara. Encontrábamos muchas manifestaciones artísticas actuales de land art que jugaban con esta idea del vacío y el lleno, así como ejemplos de viviendas – cueva en las localidades cercanas de Guadix y Zújar. Busqué inspiración sobre este tipo de arquitecturas en distintas culturas, llevándome incluso hasta actuaciones en países como Etiopía, y de todas ellas obtuve la misma inspiración.

 

Así pues, me di cuenta de que este paisaje, tan bello y lleno de historia, no podía sino ser intervenido con este concepto: la arquitectura subterránea, la que hace introducirte de lleno en el lugar, evadiéndote y contemplándolo a la vez. Contradicciones que nunca habían tenido tanto sentido.

Análisis de topografía, búsqueda de visuales y desarrollo de un programa de necesidades fueron los tres siguientes pasos. Al final, el concepto se llevó a cabo mediante la articulación de tres grandes espacios abovedados que cumplían con las funciones principales del edificio, interconectados por una serie de accesos que se abren al paisaje mediante puertas al embalse o patios que miran al propio cielo.

 

Y como todo Proyecto Fin de Carrera que se precie, llevó consigo el desarrollo de toda la parte técnica que lo hacía factible y real. El edificio, por su forma, exigía una forma de construcción no convencional, y es por eso que, gracias al asesoramiento con diferentes Ingenieros de Minas, se escogió una tipología estructural que me permitía llevar a cabo la idea.

Como PFC me pareció un ejercicio muy inspirador, ya que me sirvió para desarrollar una idea propia y poder ponerla en práctica de manera que pudiese ser lo más real posible. Poner un poco de realidad en una profesión cuya enseñanza es demasiado teórica a veces. Y además, hacerlo sin perder la creatividad y el alma de un concepto abstracto como fue este.

¡Pero no solo quedo ahí el proyecto!

Tuve la oportunidad de formar parte de una exposición organizada por la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Granada, con el apoyo del Colegio de Arquitectos de Granada y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. En la muestra se presentaron varios proyectos, con formas muy distintas de ver el paisaje y actuar en este entorno, y uno de los dibujos de mi proyecto sirvió como cartel anunciador del evento.

Por último, y aunque eso es otra historia que contaré en otro post, este proyecto me sirvió como punto de partida para el proyecto final de mis estudios de Diseño Gráfico, donde realicé el desarrollo de su Identidad Gráfica, como si de un edificio de servicios real se tratase.

¡Espero que os haya gustado! Muy pronto, ¡más proyectos!